Sin categoría

debates electorales y medios públicos/antonio regalado

A LO LARGO y ancho de la campaña electoral, los candidatos de los grandes partidos apenas se acercan en vivo y en directo a unos 100.000 ciudadanos, simpatizantes en su mayoría. La demoscopia ha constatado después de 32 años de democracia que el rito de los mítines es una reliquia ante los nuevos métodos de persuasión política donde no se caza ni un voto.

Cuando entonces, la televisión pública y el deseo de libertad justificaban ese gasto ingente de los aparatos que hipoteca toda la legislatura. Los partidos gastan porque, en buena medida, los bancos siempre son generosos con el despilfarro político y el Estado les subvenciona por votos, escaños y propaganda electoral. ¿Cómo explicar el tren de vida de las cúpulas políticas –en especial los fines de semana- cuando ingresan por cuotas de afiliados solo el 10% de sus gastos declarados?

 Hoy, con Internet, los móviles, Facebook y Twitter los mensajes llegan más rápido, más lejos y a todas horas. No obstante, nos queda un recurso último y cercano para el debate: las televisiones y radios públicas. PSOE y PP – que no son capaces de derogar la Ley de Prensa e Imprenta 14/1966, más conocida como ley Fraga- han militarizado las estaciones privadas de televisión para imponer cronómetro en mano un tiempo político-electoral en los Telediarios a mayor gloria de sus vanidades. Si eso no es una intromisión en la libertad de empresa que baje Dios y lo vea.

 Las televisiones públicas más allá de la reestructuración que necesitan a imagen y semejanza de la Corporación RTVE (y de la cuota de pantalla) tienen el deber de articular escenarios abiertos en todas direcciones para exponer los programas de los representantes populares según la representación de los últimos comicios, naturalmente. La parrilla de la TVE en CLM y de la RTVCLM en tiempo electoral debería configurarse para el debate plural regional y local. Candidatos a alcaldes de las grandes ciudades, aspirantes a regidores de las Diputaciones Provinciales y lógicamente los jefes de fila, Barreda y De Cospedal que tienen como meta dirigir vidas y haciendas desde la Presidencia de la Junta hasta la primavera del 2015, deben exponer argumentos y razones para un voto razonado.

 Nunca ha habido debates electorales en nuestra Región. Eso dice muy poco a favor de los contendientes. Y de la transparencia informativa. Es el momento de romper ese miedo a la libertad. El presidente Barreda está dispuesto a polemizar cara a cara con la presidenta popular. María Dolores de Cospedal mantiene dudas porque la experiencia le ha enseñado que TCM y TVE” “no pueden presumir de imparcialidad”. ¿Volvemos a la censura previa? A estas alturas esa duda es una excusa insuficiente. En  garitos más difíciles de la Gran Vía madrileña ha hecho guardia la secretaria general de los populares rompiendo tópicos y espejos de la prensa progubernamental.

Fíjense reglas claras y un moderador (de la tierra) consensuado. La tecnología en directo siempre es neutral. Aprovechemos los medios públicos para hacer llegar soluciones y esperanzas a una ciudadanía agobiada por múltiples problemas empezando por el paro. Hay que disparar las ansias de mejora en un tiempo de tribulaciones. La oportunidad de salir juntos de la crisis se encuentra al otro lado de las urnas. ¿O alguien cree que se hará gratuitamente, por decreto y sin sangre, esfuerzo, sudor y lágrimas? Urge discutir a todos los niveles. Debates para contar la verdad.

Centrándonos en la cúspide del poder, Barreda y De Cospedal deberían tener dos debates televisivos (en igualdad de condiciones) en TVE y TCM en el inicio y final de campaña transmitidos simultáneamente por RNE y RCM (FM) y por el resto de estaciones privadas que lo soliciten. Estos programas servirán para que los castellano-manchegos acudan mejor informados a las urnas el 22-M. Y voten, por tanto, con más libertad.

Esperanza Aguirre ya ha dicho sí al cara a cara con Tomás Gómez en TVE; Camps ha dicho no a la confrontación con Alarte en Valencia. Vara en Extremadura también quiere rehuir los enfrentamientos en directo con el popular Monago y prefiere hacer trío con IU. En estos ejemplos siempre hay que mirar al norte. Madrid es el modelo. La radio y la televisión públicas – pese a que necesitan una rehabilitación urgente- siguen siendo un servicio público esencial. Debates, sí; en las empresas audiovisuales públicas, mejor.

Sin categoría

dias de infarto

NO ME REFIERO a la de la Semana Santa que con tanto fervor y recogimiento se está viviendo en nuestra Región sino a lo acontecido en estos últimos días. Días de infarto. Unas fechas que nos marcarán a todos durante mucho tiempo  ¿Quién nos ha robado el mes de abril? Para empezar  el TC por poner en la calle al etarra Troitiño, compañero de fatigas de De Juana Chaos.  Si la Audiencia Nacional no lo remedia el día 25, se habrá perpetrado otro atentado civil contra las víctimas del terrorismo. Y este miserable estará huido.  Más allá del rifirrafe PP-PSOE todo apunta a que el Gobierno, como alerta Iturgáiz, está propiciando una amnistía soterrada para  los etarras más sanguinarios. Si Sortu, Bildu o EA (y asociados) acceden a las instituciones el 22-M es señal de que las negociaciones continúan. Desgraciadamente.  Si no se recurren todas las listas contaminadas ante el Tribunal Supremo, ni un solo voto a Zapatero.

El presidente (en funciones)  nos engañó 16 horas como a chinos con las inversiones millonarias en las Cajas; el diferencial con el bono alemán subió  y la Bolsa engulló nuestros ahorros. Anunciar en el Oriente Extremo, el mismo día en que se cumplían 99 años del hundimiento del Titánic que nuestra economía es un trasatlántico, no es lo más prudente para un gobierno a la deriva. La credibilidad de la “marca España” rodaba por los suelos y Aznar, en la Universidad de Columbia va y defiende a Gadafi, el “amigo extravagante”,  mientras duda de que el Reino de España sea capaz de devolver la deuda acumulada. Eso es patriotismo.

Por si fuera poco, Telefónica anuncia su enésimo ERE para 6.000 empleados más mientras 1.900 directivos se repartirán, en mala hora,  450 millones en “bonus”. Y luego a  César Alierta se le empañan las gafas de emoción en la Moncloa hablando de responsabilidad social corporativa y de crear becas de 400 euros.

Suma y sigue. El CAC pide que Sálvame cambie de horario cuando TV3 mantiene un lavado de cerebro catódico permanente. Unos cuantos nostálgicos  que no han leído la historia añoraron el 80 aniversario de la proclamación de la II República. Los investigadores tienen que empezar a contar que fue el mayor  tiempo de odios y desmesuras que culminaron en una guerra fratricida.

También se ha constatado en este tiempo lo evidente: que los partidos mayoritarios son los que mantienen en las listas el mayor número de candidatos presuntamente  ‘tocados’ por la corrupción. Gallardón quiere limpiar Madrid de mendigos y hasta Esperanza se opone.  Los madridistas han comenzado su Vía Crucis frente al Barça; Emiliano G.Page, a instancias de la Junta Electoral,  ha tenido que levantar de la página web del ayuntamiento sus logros del mandato y la número 3 por a la Junta por Toledo, la senadora popular  Carmen Riolobos,  ha exigido a Barreda  que explique la estrategia de enviar 100.000  Sms y postales masivas el día 20 de mayo para influir en el voto de los castellano-manchegos. Y, sobre todo, quién paga la fiesta.  Habla de tres delitos.

Pero lo peor, queridos amigos, perdonen la tristeza,  está por llegar: la encuesta de la EPA que situará  el listón del desempleo en la frontera de los 5 millones. Una semana de pre-pasión y apasionante. Entre los “hunos” y los “hotros”, que diría Unamuno, -mi querido Sabina-, nos han robado el mes de abril.

Sin categoría

la radiotelevisióm pública/antonio regalado

LA RADIOTELEVISIÓN pública no goza de buena salud. Estoy  a favor porque he tenido el privilegio de trabajar en RTVE durante casi siete lustros.  Como toda mi vida he sido periodista nada más, -y nada menos-, debo decir que no existen medios más plurales y con más libertad que los de titularidad estatal. Otra cosa es la autocensura de los “trabajadores militantes”. Funcionan bien porque la filosofía es  el servicio público. Y esto no cambia a pesar de los pésimos gestores (políticos) que la hoy Corporación ha tenido a lo largo de sus 55 años  y del estrangulando financiero de las privadas. TVE y RNE siguen ahí, vertebrando España como el Corte Inglés, liderando las audiencias televisivas en un escenario abierto con 40 canales digitales.  La credibilidad, ganada especialmente en los telediarios, confirma que la existencia de los medios públicos está justificada por su rentabilidad social. Hago extensible este reconocimiento a las empresas audiovisuales regionales y por ende a la TCM, por cierto, la única autonómica sin déficit.

La Televisión regional es el mejor vehículo para exponer las propuestas programáticas del 22-M. El PP lleva acusando desde el pasado siglo al PSOE de utilizar la radiotelevisión castellanomanchega como el brazo mediático del Gobierno: primero al de Bono y ahora al de Barreda. De hecho, la candidata popular piensa redimensionarla. Cuando tuvieron mayoría en el 2000, ni Aznar ni Rajoy modificaron la Ley del Tercer Canal para complacer a Gallardón y venderla. ¿Tan difícil es llegar a un pacto de neutralidad electoral prorrogable al día siguiente? Los debates multilaterales  incluyendo  candidatos a alcaldías importantes y a las diputaciones deben incluir los “cara a cara” (dos o tres) entre Barreda y de Cospedal. Ilusionar a una sociedad desencantada que no creará empleo hasta la segunda mitad de 2012  y que necesitará tres quinquenios de contención salarial -Valeriano Gómez, dixit- es otra forma de hacer rentable política y socialmente una cadena regional -RTCLM-que habrá que reestructurar sin prisas durante la VIII Legislatura. Tiempo hay para hablar del costo.